11 de Agosto de 1997 (Maria)
Hijos Míos,
Vengo este día para animarlos en su jornada a la santidad. Extraigan fuerza, hijos Míos, a través de la comunión con Dios en oración. Recen, pequeños, ---- hagan un esfuerzo más grande para que su vida de oración crezca para que ustedes puedan experimentar la verdadera alegría de paz en sus corazones ---- la paz de una relación personal con Jesús.
Yo, su Madre, conozco sus sufrimientos y dudas. Deseo un abandono completo de su voluntad a la de Jesús. Sumérjanse en El quien es toda bondad y amor y ustedes recibirán los dones para sostenerse a través de esta vida.
Mucho los espera, preciosos seres Míos. Cada día es un regalo glorioso de Dios. Pronto deberán dar cuentas por lo que se les ha dado. Sean valientes, pequeños Míos. ¡Paz y amor!
11 de Agosto de 1997
(Servicios de oración el lunes por la noche en San Andrés) (Maria)
Hijos Míos,
Nosotros derramaremos muchas bendiciones sobre todos aquellos que vengan a la montaña buscando la misericordia de Mi Hijo. Sus esfuerzos, hijos Míos, no van a pasar sin ser recompensados.
Paz y amor.