Hijos Míos,
Mi paz Maternal les traigo este día y les pido, Mis preciosos seres, a ser discípulos de paz y amor. Unan sus corazones a los Nuestros porque en sus vidas diarias van a tocar muchas almas dolientes --- almas buscando la paz y el amor de Jesús.
Tantos desperdician este precioso regalo de vida poniendo el tiempo con Jesús lejos de sus corazones y así rechazan o no reconocen los regalos que El pone a la disposición de cada alma. Ámenlo a El quien los ama a ustedes --- procuren cumplir con El mientras aun hay tiempo. Conviértanse en corazones puros a los cuales Su Divino Amor fluirá.
Hijos Míos, El está extendiendo cada misericordia --- Les urjo al mismo tiempo que caen las lágrimas de Mis ojos a que se arrodillen en gratitud, porque ustedes aun no entienden la magnitud de este gran regalo. Oren, hijos Míos --- oren porque éste es realmente un gran tiempo de misericordia. ¡Paz y amor!