24 de Noviembre de 1997 (Maria) (En Illinois hasta 12/7/97)
Mis queridos hijos,
Deseo que todos los corazones estén llenos de amor y deseosos por santidad. Nosotros estamos contentos con los corazones que se han reunido llenos de amor a honrar Mi petición de alabar a Jesús e implorar Su Divina Misericordia. Ustedes, preciosos Míos, no se dan cuenta del poder de sus oraciones cuando se reúnen para desempeñar aquello que se les ha pedido. Su fe florece como las flores en la primavera trayendo hermosura y esperanza para los días que vienen.
No se desesperen al ver que la oscuridad pretende oprimirlos, pero en fe y alegría proclamen la bondad y la verdad que iluminan su camino hacia la santidad.
Reúnanse en una fortaleza común porque el Espíritu Santo va a dirigir su camino de rectitud y la alegría y la paz llenarán sus almas. Nunca teman porque ustedes están enormemente bendecidos. Yo los bendigo este día y los acerco más a la fuente de la Misericordia Divina. ¡Paz y amor!