22 de Octubre de 1997 (Jesús)
Hijos Míos,
Sepan, hijos Míos, Yo estoy con ustedes siempre --- Yo vengo a traerles Mi paz y animarlos porque los tiempos que se acercan son difíciles y llenos de incertidumbres. Dependan únicamente en Mí y Yo veré por sus necesidades y aquellos deseos puros de su corazón. Yo escucho cada uno de sus pensamientos --- nada está oculto.
Les envío a sacerdotes especiales, Mis hijos cuyos corazones están acelerados con el deseo de servirme. Procúrenlos porque en ellos encontrarán un refugio de paz en estos tiempos turbulentos. Las falsas enseñanzas de este mundo van a causar duda y van a desviar a muchos. Ustedes han sido advertidos pero quiero que sepan que Mi misericordia es grande y Mi perdón no tiene límites.
Llámenme... procúrenme y busquen con todo su corazón porque Yo soy su amantísimo Salvador aquí para acercarlos a Mi fuente de misericordia mientras ustedes todavía pueden ser refrescados. Permítanme llenarlos con paz y seguridad que Mi amor perdura para siempre. Nunca duden y siempre confíen. Yo los amo, hijos Míos, y deseo su verdadera felicidad. Vengan a Mí mientras aun hay tiempo. Oren y Yo los escucharé y les responderé. Los bendigo este día en Mi alegría y paz.