27 de Septiembre de 1997 (Maria)

 

Mis queridos hijos,

 

Permitan que sus corazones se llenen de paz y así puedan escuchar Mis palabras mientras procuro traerlos hacia la Luz de Amor, Paz y Alegría de Jesús. Reciban todo lo que es bueno y puro ahora, hijos Míos, porque pronto la opresión buscara su mundo para apagar la llama de esperanza de sus corazones.  Unan sus corazones a los Nuestros, queridos, mientras que aun la oportunidad está disponible.

 

La obscuridad debe venir, pero no puede extinguir aquella luz la cual ha sido enraizada profundamente en la verdad.  Acojan esa Luz porque por su fe brillará como un farol de esperanza para todos aquellos que buscan asegurar el amor de Dios.

 

Nunca duden ni teman sino en absoluto y tenazmente continúen adelante --- aunque no puedan ver deben creer.  Benditos son, preciosos Míos, quienes aunque a veces se sienten incomprendidos, van a perseverar hasta el final.  Prepárense --- la fiesta nupcial se aproxima.  Las invitaciones han sido enviadas.  Contemplen con corazones abiertos aquello que ha sido revelado a ustedes.  Prepárense y regocíjense, O, escogidos Míos.
  • Hits: 2984

Drone footage presented by Finding Sacred Spaces.