15 de Agosto de 1997
(Durante el Rosario de La Divina Misericordia) (Maria)
Mis queridos hijos,
Ustedes, hijos Míos, son Mis fieles seguidores llamados al servicio de Mi Hijo. Ármense bien con oraciones. El Espíritu Santo está listo para ayudarlos ---- espera su llamado. Legiones de ángeles están preparándose para la batalla ---- la batalla final que se aproxima.
Deseo que ustedes ofrezcan sus tareas diarias como las requiere esta vida como flores de oración recogidas para adornar el trono de Jesús. Cada uno de ustedes es precioso es forma única ---- cada uno creado por la mano de Dios y creado para tomar su lugar en Su plan maestro. Nada sucede al azar ---- acepten Su Divina Voluntad ---- un precioso regalo a todos presentado envuelto en Su amor y compasión.
Les doy las gracias a ustedes, Pequeños Míos, por honrarme en este día. Acérquense a Mi corazón y reciban Mis bendiciones Maternales. ¡Paz, queridos Míos, - paz!
15 de Agosto de 1997
(Durante el Rosario de el Cañón viernes en la noche) (Maria)
Mis preciosas criaturas,
Mi corazón está lleno de alegría por todos los que han venido en este Mi día festivo. Sepan, hijos Míos, donde Yo estoy, ahí también está Mi Hijo. Miren con sus corazones, o, preciosos Míos, y vean Sus manos cicatrizadas por los clavos, las cuales tiende hacia ustedes. Regocíjense, porque esta noche es Mi Hijo quien los bendice. ¡Hemos oído las peticiones de sus corazones y los acercamos, a cada uno de ustedes, a Nuestra fuente de amor y misericordia!