11 de Mayo del 2001
"Mis Queridos Hijitos,
Vengo en la suave brisa apenas discernible, pero delicadamente acariciando con amor a cada alma tan tierna. Es con tal ternura que son llamados a radiar el calor del amor incondicional. Mientras unen sus corazones, forman un cobertor de auto-sacrificio que oprime el frió del amor propio que se detiene por todo el mundo. Cansados y espiritualmente hambreados, Mis hijitos, andan por el mundo...... la chispa de gozo no brilla más en sus ojos ......pues Mi Hijo camina entre Su gente sin ser reconocido. Es de Su paz y gozo que ustedes deben ser receptáculos......deseosos de ser vaciados como una libación para las almas dolientes.
Es tiempo de que las heridas sanen. El perdón es el bálsamo suavizante que sana. Así como ustedes, Mis hijitos, perdonen......se acercan más a ese amor desinteresado del que Yo les hablo ......pues este amor es el amor de Dios. Es la jornada para la cual se preparan. Tengan valor pues, Dios en Su misericordia infinita los guiará a su hogar."
(Visual: Vi un área con varios tonos de gris. Una por una, luces brillantes aparecen ...... solo unos puntitos de primero y gradualmente parecía que alguien prendió más luces hasta que todo brillaba intensamente. La palabra gozoso vino a mi mente. Después oí, “Es la decisión conciente de un alma al perdonar, que enciende la llama del amor en una explosión espontánea desparramando la luz de la paz y la armonía de Dios a un mundo en tinieblas y sin gozo”.)