26 de Abril del 2002
(Segundo mensaje - de Maria)
(Pat) Lenguas
(Maria) Mi Querida Niña,
No te preocupes esta noche…… que tu voz no es como ha sido…… es una ofrenda para Dios. Por este sufrir…… otros vendrán a traer sus pequeñas ofrendas a Nuestro Senor…… y muchas almas se salvarán.
Como (el severo viento afuera) soplaba…… y cuantos objetos fueron tirados de un lado a otro. ¿No fue también tu alma…… la que se tiraba de un lado a otro? Era la gracia de Dios…… que permitió tanto movimiento…… tanto tumulto en un día tan normal. Para que tú sepas que El está siempre contigo en cada circunstancia de tu vida. No hay un alma que vamos a dejar ir. El viento sopla de un lado a otro…… y te sientes atrapada…… no viendo que tu confianza en Dios vacila tan poquito…… no como la tormenta……si no como una suave brisa en los árboles y en el aire de los campos ……es tan leve cuando cualquier tumulto amenaza sus vidas.
Hijitos, son los amados de Dios y sienten esta ansiedad…… en estos momentos de incertidumbre…… llámenlo a Él…… y en momentos, momentos de tiempo……sentirán las manos de Dios descansar en sus hombros…… para renovar con Su fortaleza y Su amor. Les digo que recen……recen el Rosario……usen sus escapularios…… tengan agua bendita en sus hogares y bendíganlos frecuentemente……pues la batalla se acerca, la batalla en la cual los hijos de Dios deben estar preparados sin temor…… y con una confianza total en la misericordia de Dios. Sí, hay tantas cosas que no comprenden…… pero la sencillez de confiar en Dios y Su santa voluntad traerá todo dentro de Su luz…… para que puedan ver el propósito de Su plan. Mantengan la palabra de Dios……
aférrense a ella y a Sus promesas y audazmente proclámenlas pues vienen de Dios…… y El no los defraudará. El les ha dado estas herramientas poderosas…… para fortalecerlos en la jornada…… y sí……y sí les repito, la batalla vendrá…… el viento soplará…… pero ustedes estarán plantados firmemente en la palabra de Dios…… fortalecidos con Su amor y Su misericordia. No teman, pequeñitos…… no teman, Pues Dios está con ustedes…… Él es la fortaleza……y la paz que viene a sus vidas, especialmente en esos momentos cuando la ansiedad rompe sus propias almas. Tomen tiempo para estar con Dios. Permítanse estar tan quietos que el caer de un alfiler no se notará. Escuchen la voz de Dios…… muy tenue…… y deben estar amparados…… para creer que Dios les habla……que Él los anima……y que los ama, como un padre ama a sus hijos. Jesus no permanece lejos, si no que los abraza…… Sientan Su gran poder……cuenten con el poder de Dios……pues con ésto se llenarán sus almas de paz. Su fortaleza vendrá a sobre llevar toda adversidad pues Dios solo es El Santificado. "Él es El Senor y Él protegerá a todos los que le pertenecen".
26 de Abril del 2002
(Jesus habla)
(Pat) Durante la tarde del 26 de Abril, llegué un poquito tarde para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia. Esperábamos huéspedes muy especiales de Tucsón y como no estaba segura de que se quedarían para el Rosario del viernes en el Cañón, decidí decir una bendición con ellos. Esto no parece nada fuera de lo común, solo que acababa de regresar de una cita con el médico pues los antibióticos que tomaba me causaban problemas al hablar y al comer. Por la gracia de Dios, estas bellas personas hicieron oración por mí y experimente la más hermosa presencia de Nuestro Senor.
Como pasa frecuentemente, hubo un hermoso diálogo en “lenguas”. Cuando ésto se experimentaba, todo se hablaba y se entendía en nuestra lengua natural. Es un idioma completo de “amor” con “consejos” tiernos y discernimiento. Uno solo puede descansar en el Espíritu y sentir la presencia de Dios entiendo que, sin duda, Él es el que está en control.
Jesus habló de Sus hijitos, especialmente los que se recrean en la luz de Su amor y devuelven ese amor a otros. El Hijo llenó la Capilla de una gloria radiante y fue imposible no llorar y temblar bajo el poder de este Amor Divino. Se sentía como si una gran y brillante Hostia nos había cubierto completamente. Lloramos con lágrimas de Amor y gratitud.
Nuestro Senor frecuentemente habla de la gloria que les espera a los que confían en el Santísimo Nombre de Jesus pues fue Él quien pagó el precio de nuestra redención al derramar Su cuerpo y Su sangre preciosa. ¿Qué más podemos decir, si no “Que se haga Tu Santa voluntad?” Sí dijo que nuestra salud mejoraría por medio de una dieta de perdón, paciencia y humildad. Solo sanaremos yendo al Gran Médico para recibir nuestra dosis diaria de los frutos frescos del Espíritu Santo. Es como una hermosa ensalada con los dulces amores de la Misericordia Divina.
Nos pide ser audaces…… a actuar sin temor…… pues la única arma que necesitamos es la confianza en el precioso nombre de Jesus. Su sangre nos lleva a nuestro propio Calvario. Hay que toMaria otros de la mano para seguir el camino que nos guié a la Cruz. Juntos somos fuertes pues estamos unidos por el amor de Jesus…… inclinen sus cabezas y sus corazones en oración…… y canten gozosamente a Dios, Nuestro Senor.