20 de Septiembre del 2002 (Jesus y Maria hablan)
(Maria) “Mis queridos hijos,
Los saludo esta noche en este santo lugar, como la madre que ha sido enviada a consolar a Sus hijos para acercarlos a Dios y encontrar paz en el Sagrado Corazón de Mi amado Hijo. En los tiempos que he venido a instruirlos, Los he observado como niños que se reúnen a Mi alrededor mientras los enseño. Como los amo y los he entrenado para ir adelante como guerreros de paz. Esta noche serán conocidos como Mis gentiles pacificadores, armados como siempre con Mis rosarios y escapularios”.
(Pat) “Hay un cerro grande bien iluminado. Puedo ver muchas paredes. Sentado en lo alto está un hombre todo de luces y a su lado está una dama. Nuestra Senora de Luces. El hombre empieza a hablar. La Senora, Nuestra Madre, baja Sus ojos con gran amor y respeto mientras Su hijo dice;”
(Jesus) "Los envió como luces centelleantes en la oscuridad de este mundo como portadores de Mi amor y Mi paz. No teman hijos Míos, Yo voy delante de ustedes y siempre estaré con ustedes. Pero el mundo ahora llama a cada uno de Mis hijos para que valientemente tomen su cruz y con la suavidad de una paloma vayan adelante como Mis Discípulos."
(Pat) Las pequeñas luces, pequeñas almas centellean y mientras ellas se reúnen a nuestro alrededor…… de esta montaña, un cerro grande …… ahora empiezan a descender y el valle abajo que estaba oscuro está ahora lleno de luces que destellan …… destellan con esperanza …… destellan con el amor de Dios."
(Maria) "Hija Mía,
Pronto los tiempos más difíciles vendrán y la única arma verdadera para pelear el enemigo es la oración. Reza con un corazón lleno de amor y tú conquistarás la maldad que se remolonea a través de todo tu mundo."